Infolatam Bogotá, 27 de agosto de 2009
A unas horas del inicio de la cumbre de la Unasur en Argentina, las posiciones se radicalizaron este jueves aún más frente al convenio militar Bogotá-Washington, mientras que la preocupación peruana por un supuesto "acuerdo bajo la mesa" entre Chile y Bolivia quedó relegada a un futuro encuentro.
Con el convenio militar entre EE.UU.y Colombia como tema central, los presidentes de los doce países de la Unasur se reunirán en Bariloche, situada 1.650 kilómetros al sur de Buenos Aires, para conseguir del mandatario colombiano, Álvaro Uribe, garantías sobre su acuerdo con Washington.
Sin embargo, en la víspera de la cita, la discordia en las relaciones entre los Estados miembros del organismo regional se ha avivado por el cruce de declaraciones entre varios gobernantes. Este acuerdo, que ha generado el rechazo de varios países de la región y sólo está pendiente de firma, permite el uso por parte de tropas estadounidenses de hasta siete bases militares en territorio colombiano.
En un mensaje a sus colegas de la Unasur publicado por el diario argentino Página/12, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, admitió estar "real y profundamente preocupado por la situación de tensión con Colombia frente a la instalación de al menos siete bases militares" estadounidenses en ese país.
"El imperio norteamericano ha iniciado una contraofensiva", que comenzó el 28 de junio pasado con el golpe de Estado en Honduras, ante "los avances progresistas y democráticos" en el continente, afirmó Chávez, para quien la cita en Bariloche estará centrada "solo" en el acuerdo militar de Colombia y EE.UU.
El Gobierno de Álvaro Uribe reiteró, por su parte, que pedirá respeto a su soberanía en la cumbre de Unasur, que -dijo- debe abordar otros temas de interés para la región, como la carrera armamentista de algunos de sus vecinos -en clara alusión a Venezuela-, los acuerdos de cooperación extraregionales y el terrorismo.
En Bolivia, el presidente Evo Morales insistió hoy en su propuesta de que, en caso de una falta de consenso en Bariloche, se celebre un referendo regional para consultar a las poblaciones si están o no de acuerdo con la presencia militar estadounidense en Colombia.
En la misma línea, el gobernante ecuatoriano, Rafael Correa, arremetió desde Lima contra Colombia, al cuestionar su capacidad para controlar el uso que las tropas estadounidenses harán de las bases militares en su territorio. ¿Cuándo los norteamericanos se han dejado controlar?", dijo Correa, quien recordó que su país tuvo una base estadounidense durante una década (la base de Manta) y aún tiene "graves denuncias de una serie de actos que se están investigando".
Pese a las declaraciones de Correa, su canciller, Fánder Falconí, intentó bajar la tensión, al manifestar que Ecuador, que ejerce la presidencia temporal de la Unasur, asiste al cónclave de Bariloche con una voluntad conciliadora.Mientras Venezuela, Ecuador y Bolivia rechazan tajantemente el acuerdo entre Colombia y EE.UU., otras naciones han manifestado su preocupación, pero también su respeto a la soberanía de las decisiones colombianas. En esta línea se enmarcan Argentina, Chile y Paraguay.
El gobernante brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, también preocupado por el convenio militar, está a favor de un "diálogo franco" sobre el tema y del fortalecimiento del Consejo de Defensa de la Unasur para que contribuya a la resolución de este tipo de tensiones.
El presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, también propuso que el polémico acuerdo militar sea debatido en la comisión de Defensa del grupo.Por su parte, el canciller peruano, José Antonio García Belaúnde, reafirmó que ese país respeta la decisión de Colombia y que esa será la posición de Lima en la cumbre de Unasur.
Un tema que finalmente sí estará ausente de esta cumbre serán las conversaciones que sostienen Chile y Bolivia desde el 2006 en base a una agenda de trece puntos. El presidente peruano, Alan García, anunció el martes que iba a pedir a Santiago y La Paz que aclararan en la cumbre de Unasur su agenda "reservada" de trece puntos, después de insinuar que ambos países negociaban un acuerdo "bajo la mesa" para darle una salida al mar a Bolivia.
El Gobierno chileno confirmó hoy que la mandataria Michelle Bachelet sostendrá una reunión bilateral con su homólogo boliviano, Evo Morales, durante el cónclave de la Unasur.
Infolatam Bogotá, 28 de agosto de 2009
Los presidentes de Ecuador, Rafael Correa, y Venezuela, Hugo Chávez, pidieron hoy a su homólogo colombiano, Álvaro Uribe, que presente el documento del acuerdo que alcanzó con Estados Unidos para el uso de bases militares colombianas.
"Sería bueno, señor presidente Uribe, que nos remita el documento del acuerdo", dijo Correa, presidente en turno de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), tras escuchar los argumentos de Álvaro Uribe en defensa del acuerdo con Washington.
También Hugo Chávez, al inicio de su intervención en la Cumbre, coincidió en la "necesidad" de que Uribe presente el "documento integral" o que al menos "lo adelante para salir de tantas dudas e incógnitas que, por lo menos, tiene Venezuela"La cumbre en la ciudad argentina de Bariloche fue convocada para debatir el acuerdo negociado pero aún no suscrito entre Colombia y EE.UU. para que tropas estadounidenses utilicen bases militares colombianas, que ha generado preocupación y malestar en la región
Infolatam Bogotá, 28 de agosto de 2009
El presidente de Bolivia, Evo Morales, propuso a sus colegas de la región "no tener miedo" de firmar una declaración conjunta de rechazo a las bases militares extranjeras en Sudamérica en el marco de la cumbre que debate el polémico acuerdo entre Colombia y EE.UU. para que militares estadounidenses usen bases colombianas.
"Si nadie quiere una base militar por qué no podemos firmar acá un documento que (indique que) los presidentes de Sudamérica no aceptan ninguna base militar extranjera", sostuvo Morales durante su intervención en la cumbre de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), que se desarrolla en la ciudad argentina de Bariloche.
"Estados Unidos trata de crearnos desconfianza a presidentes de Sudamérica que estamos gestando la unidad. Para crear desconfianza, para enfrentarnos, los imperios nunca han querido la unidad de Sudamérica. No queremos ser instrumentos de la división" de la región, sostuvo.
Morales dijo que comparte la propuesta del presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, acerca de que "se trata de buscar paz", pero consideró que "mientras haya presencia de bases extranjeras en el ámbito sudamericano, difícilmente se puede pensar en paz".
"No se puede permitir una presencia militar extranjera en nuestro territorio. Es un mandato noble y sagrado que nos dan nuestros pueblos. Pensar que con este acuerdo se va a mejorar una lucha contra el narcotráfico, dudo; sólo es una presencia política militar para control a otros países", ratificó el mandatario de Bolivia, que junto a Venezuela es el más crítico del acuerdo colombo-estadounidense.
Morales puso en duda que el acuerdo militar sea para la lucha contra el narcotráfico, como sostiene el presidente de Colombia, Álvaro Uribe.
"Quiero defender la propuesta boliviana orientada a rechazar las bases colombianas en Sudamérica", a raíz del acuerdo para permitir "presencia militar en otro país con el pretexto de lucha contra el narcotráfico", enfatizó Morales, quien además cuestionó las "intervenciones" de Estados Unidos en terceros países.