Natasha Pitts
Periodista de Adital
Adital
Después de la promulgación de la
Ley de la Madre Tierra y
Desarrollo Integral para el Buen Vivir, el último lunes (15) por parte del
presidente boliviano Evo Morales, la Coordinadora Andina
de Organizaciones Indígenas (Caoi) decidió manifestarse asegurando que la
legislación no contempla las propuestas de los pueblos indígenas, que fueron
sugeridas mediante del Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu -
Conamaq. La organización afirma que la norma no pasó por la consulta a los
pueblos originarios y el documento consensuado por el Pacto de la Unidad no fue respetado.
Buscando insertar
las contribuciones de los pueblos indígenas en la ley, el Conamaq escribió el
24 de agosto una carta a la presidenta de la Cámara de Diputados, Rebeca Delgado, con
observaciones en relación con el Proyecto de Ley aprobado por la Comisión de Tierra,
Territorio, Recursos Naturales y Medio Ambiente del Senado. Las observaciones
presentes en la carta rescataban el proyecto de ley acordado por el Pacto de
Unidad. A pesar de este esfuerzo, las recomendaciones del Consejo no fueron tenidas
en cuenta.
Ahora, con la
aprobación de la ley, la Caoi
señala que el Conamaq está preocupado por el hecho de que las instituciones
públicas se están distanciando cada vez más de la visión y del derecho al
desarrollo de los pueblos indígenas y sus organizaciones.
En carta
enviada en agosto, el Consejo dejó en claro esta preocupación afirmando que la
ley descarta el tratamiento integral de la biodiversidad e introduce el modelo
extractivista "bajo el nombre de desarrollo integral, apuntando a destruir a la Madre Tierra, con
efectos de contaminación y depredación, debido a la expansión de la minería, de
la explotación hidrocarburífera y la ampliación de la frontera agrícola”.
El Conamaq
alertó en este mismo documento que la ley busca sustentar las bases de un
desarrollo integral que se abra al emprendimiento privado, teniendo como
consecuencia la acumulación de capital y la mercantilización de la Pachamama.
Dejando de lado estas críticas, el presidente celebró la promulgación de
la ley, que, según se está divulgando, tiene como objetivo buscar el
desarrollo integral en armonía y equilibrio con la naturaleza, además de ayudar
a garantizar la continuidad de la generación de los componentes y sistemas de
vida de la Madre Tierra.
Traducción:
Daniel Barrantes - barrantes.daniel@gmail.com