domingo, 17 de junio de 2012

Elecciones en Grecia: primeros resultados dan ventaja a conservadores

Sondeos a boca de urna y resultados oficiales indican que Nueva Democracia fue el partido más votado en los comicios del país


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(Foto: AP)

Atenas (DPA / EFE). El partido conservador Nueva Democracia obtuvo hoy una ligera ventaja frente a la coalición izquierdista Syriza en las elecciones parlamentarias en Grecia, según nuevos sondeos a boca de urna emitidos por la televisión.

Nueva Democracia (ND) se llevó entre el 28,6 y el 30% de los votos, frente a entre el 27 y 28,4% de Syriza, indicó la cadena privada Mega Alpha. Por su parte, la televisión estatal NET atribuyó a los conservadores entre el 28,6 y el 30 por ciento de los sufragios, mientras que los izquierdistas se habrían llevado entre un 27,5 y un 28,4.

La privada Ant 1 dijo también que ND lleva la delantera con entre un 28,6 y un 30 por ciento, frente a entre el 27 y 28,4 por ciento de Syriza.

El partido más votado en las elecciones recibe automáticamente 50 escaños extra, de los 300 del Parlamento.

RESULTADOS OFICIALES

En tanto, EFE da cuenta que los primeros resultados oficiales señalan que Nueva Democracia (ND), encabezada por Andonis Samarás, fue el partido más votado con el 16 % de los votos escrutados.

Según esos datos, ND obtendría el 31,11% de los votos mientras que la izquierda de Syriza lograría un 25,31%. Las elecciones son consideradas cruciales para el futuro de Grecia, inmersa en una grave crisis económica, y de la Eurozona.

Lideres de Europa instan a votantes griegos a rechazar la izquierda radical

Los líderes europeos pidieron realizar un voto a conciencia ante el temor de un posible triunfo del izquierdista Alexis Tsipras, quien se opone a los términos de rescate de la UE.

Atenas (Reuters).- Los líderes europeos instaron a Grecia a rechazar a la izquierda radical que amenaza con desmantelar el acuerdo de rescate si ganan las elecciones de este fin de semana, un resultado que podría convulsionar a los mercados financieros globales.

Tras haber surgido al escenario político gracias a una ola de irritación pública, el líder izquierdista de SYRIZA, Alexis Tsipras de 37 años, promete rechazar los severos términos del rescate de 130.000 millones de euros (163.750 millones de dólares) que recibió Grecia si gana los comicios del domingo.

Desde la derecha, el heredero y líder conservador de Nueva Democracia, Antonis Samaras de 61 años, dice que negar el rescate terminaría por sacar a Grecia de la zona euro y generaría una catástrofe económica en la región.

En vista de los comicios sumamente determinantes, los líderes europeos hicieron una serie de llamados el sábado y pidieron a los griegos que voten a conciencia.

El rescate de Grecia no será renegociado, advirtió la canciller alemana, Angela Merkel, jefa de Gobierno de un país cuya riqueza es vital para apoyar las economías de los miembros más débiles del bloque.

“Esta es la razón por la cual es tan importante que las elecciones griegas preferentemente lleven a un resultado en el cual quienes formen el futuro Gobierno digan: ‘sí, cumpliremos con los acuerdos’”, dijo Merkel en una conferencia política.

El jefe del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, sostuvo que habría consecuencias graves si SYRIZA consigue la victoria.

“Si gana la izquierda radical – algo que no se puede descartar- las consecuencias para la unión monetaria son imprevisibles”, dijo Juncker, responsable del grupo de ministros de Finanzas de la zona euro, al periódico austriaco Kurier.

“ Sólo puedo advertir a todos en contra de abandonar la unión monetaria. La cohesión de la zona euro podría estar en peligro”, manifestó.

Tsipras sostiene que los prestamistas de Grecia no cumplirán con sus amenazas de suspender la entrega de fondos si Atenas reniega de las condiciones de sus rescate: alzas de impuestos y recortes de empleos y salarios que han ayudado a condenar al país a cinco años de recesión.

Hoy Grecia vota en serio

Grecia disfrutó con el voto contestatario y rebelde del 6 de mayo que crispó a Europa. Esta vez, la sociedad griega decide -agobiada- entre sólo dos fuerzas políticas, a modo de referéndum: una se dice dispuesta a los sacrificios que impone el pactado segundo plan de rescate (la conservadora Nueva Democracia) y la otra (la Coalición Radical de Izquierdas Syriza) aspira a seguir en la eurozona, pero dictando las condiciones a quienes tienen los fondos (130.000 millones de euros) que necesita Grecia con urgencia.

Europa redobló a última hora sus advertencias: Syriza disgusta. Angela Merkel fue explícita ayer en una reunión de la CDU -aun a riesgo de exacerbar el nacionalismo griego que Syriza ha sabido captar-. La canciller alemana resaltó la importancia "de que las elecciones griegas conduzcan preferentemente a un resultado en el que quienes formen gobierno digan: sí, cumpliremos los acuerdos". También Jean Claude Juncker, responsable de la eurozona, previno a navegantes griegos. "Si gana la izquierda radical griega -lo que no es descartable-, las consecuencias para la eurozona son impredecibles", señaló en una entrevista al diario austriaco Kurier.

Realismo o rebeldía, el gobierno que hoy emerja de las urnas tiene un panorama dramático. Quinto año de recesión, desempleo de más del 22%, falta de liquidez del Estado, una burocracia otomana... "Nuestra existencia como nación está en juego", proclamó frente al Parlamento anteanoche el líder conservador Andonis Samarás. Esta vez, la frase parecía realista, a diferencia de tantas otras pronunciadas en los mítines de campaña.

Las encuestas están prohibidas desde hace dos semanas, pero las últimas detectaban inequívocamente que el voto se va a polarizar entre Nueva Democracia y Syriza, lo que puede facilitar la formación urgente de un gobierno -hecho imposible el 6 de mayo-, capaz de responder a lo que Europa espera de Grecia: ¿van a respetar o no el acuerdo de rescate pactado en abril con la troika que exige -e impone- sacrificios y recortes? Los sondeos que se manejan en Atenas, tanto en las sedes de los partidos como en las embajadas, coinciden en una gran igualdad, con ligerísima ventaja de Nueva Democracia.

En lo que sí son rotundos los sondeos es en la voluntad de los ciudadanos de no volver -si es que se puede- al dracma, y del realismo de los electores hoy dependerá que eso no se cumpla. "La gente está angustiada sobre sus ahorros, sobre sus puestos de trabajo, está angustiada por su futuro y por el futuro de sus hijos", decía ayer Stathis Psillos, profesor de Filosofía de la Universidad de Atenas, a la agencia Ap.

El problema de fondo es que hoy decide un electorado donde abunda la desesperanza en el futuro. "Puestos a ser pobres, es mejor rebelarse contra quienes nos han conducido a este panorama. Yo votaré Tsipras" (el inexperto líder de la heterogénea Syriza), indica Alexandros Kakaletris, un funcionario de 43 años. La receta de Syriza no pasa por recortar el sector público -un 22% de sus votantes el 6 de mayo fueron funcionarios, por cierto- sino reformarlo y extraer los recursos que necesita el erario de los impuestos, sobre todo entre los griegos adinerados. La palabra "democracia" es de origen griego, la palabra "impuestos" viene del latín...

La gente de Syriza se dice con fuerzas para modernizar la administración y la forma de funcionar de los 717.000 empleados públicos (Grecia no dispuso de una cifra fiable... ¡hasta hace un año!). "Durante más de 30 años (la dictadura militar griega acabó en 1974), el Estado se ha convertido en una sociedad anónima. Nuestros políticos no hacían política de Estado sino negocios de Estado", indica Vasilis Moulopoulos, diputado y portavoz de Syriza desde la sede central, donde se respira confianza. En menos de dos meses, Syriza ha pasado de ser una coalición de grupúsculos con aroma de reliquia de la izquierda griega -siempre tan suya- a tener al mundo pendiente de sus mínimos movimientos.

Este éxito sin precedentes en Europa en muchos años sólo se explica por el enorme desprestigio de los dos grandes partidos que se han alternado en el poder desde 1974: la Nueva Democracia conservadora y el Pasok, que se conforma hoy con ser la distante tercera fuerza pero cuyos escaños pueden contribuir a formar "el gobierno de unidad" que propugna Samarás, el líder conservador. La polarización también podría dejar a Amanecer Dorado, el partido de ultraderecha, por debajo del 5% de los votos. Samarás ha tratado de captar estas seis semanas el voto xenófobo. "Mientras las familias griegas sufren, Syriza ofrece a los inmigrantes importantes beneficios", dijo en el cierre de campaña.

Nueva Democracia porta hoy los deseos oficiales de Europa. Pese a su responsabilidad directa en ese Estado caótico llamado Grecia, sigue siendo una opción menos incierta y fiable que la del espíritu del dracma que late en el alma de Syriza.

"El voto de hoy no debe basarse en la rabia sino en la esperanza del futuro, debe de basarse en la Grecia del euro y no en la Grecia del dracma", imploraba ayer el editorial del diario de centro-izquierda Ta Nea.