miércoles, 1 de mayo de 2013

Manifestaciones del 1º de Mayo contra la austeridad y la desigualdad

Por Sylvie GROULT (AFP)

MADRID — Una Europa golpeada por el desempleo se manifestaba este miércoles en el Día de los Trabajadores contra las políticas de austeridad, al tiempo que Asia denunciaba las condiciones laborales y el papa Francisco reclamaba a los políticos generar empleo respetando "las reglas de la justicia social".

Tanto en Grecia como en España, los dos países del sur del continente donde el desempleo bate todos los récords, afectando a más del 27% de la población activa, miles de personas se manifestaron convocados por los sindicatos.

"6.200.000 parados, no a la austeridad", "+democracia, -austeridad", "esta austeridad arruina y mata", se podía leer en algunas de las pancartas que portaban los participantes en la marcha organizada en Madrid, una de las 82 convocadas por los sindicatos en toda España para "poner en evidencia el fracaso total de las políticas de austeridad".

"La inseguridad prevalece entre los jóvenes. No hay nada que anime a seguir estudiando", dijo en Atenas Yorgos Tavoularis, un estudiante griego de 21 años.

Unas 13.000 personas, según la policía, se manifestaron en Atenas y Salónica, en un momento en que el país está sometido a drásticos recortes en salarios y pensiones, y sufre su sexto año consecutivo de recesión.

Mientras tanto en Lisboa, miles de personas marcharon contra las políticas de austeridad impuestas desde hace dos años por la "troika" (Unión Europea, Fondo Monetario Internacional y Banco Central Europeo).

"¡Fuera troika!", "¡FMI go home!", "¡La troika no me ayuda, me roba!, se podía leer en pancartas desplegadas en el centro de la ciudad.

Unas horas antes, manifestantes se enfrentaron a la policía en Estambul al grito de "muerte al fascismo", "larga vida al 1º de Mayo", después de que las autoridades prohibieran las manifestaciones en la plaza Taksim, lugar emblemático de la ciudad turca, debido a sus obras de renovación.

En Francia, donde aumenta la impaciencia frente al aumento del desempleo un año después de la llegada al poder de un gobierno de izquierdas, las dos principales centrales sindicales, la CGT y la CFDT, que no están de acuerdo sobre la respuesta a dar a la crisis, marcharon de forma separada.

"Hay un fuerte descontento que debe expresarse", dijo Thierry Lepaon, líder de la CGT. "Enviamos una carta abierta al gobierno para recordarle el desfase en un año entre los anuncios hechos (durante la campaña presidencial) y las medidas que se han tomado", añadió.
Según el líder sindical, entre 120.000 y 150.000 personas se manifestaron en Francia.

En el Vaticano, ante miles de fieles que asistían a la audiencia semanal, el papa Francisco exhortó a los políticos "a hacer todo lo posible para reactivar el mercado laboral" y denunció el desempleo como la consecuencia de un pensamiento económico que omite "las reglas de la justicia social".

En Venezuela, mientras tanto, chavistas y opositores marchaban en Caracas por el Día de los Trabajadores, luego de que la víspera la tensión poselectoral se desbordara en la Asamblea Nacional con enfrentamientos a golpes de puño entre diputados y el anuncio de la oposición de que el jueves impugnará formalmente el resultado de las elecciones del 14 de abril.

Nicolás Maduro, que venció en los comicios por un margen de 1,49 puntos porcentuales al líder opositor Henrique Capriles, encabeza la marcha de los trabajadores chavistas hasta la céntrica Plaza O'Leary, donde tiene previsto pronunciar un discurso.

La oposición venezolana impugnará este jueves ante la justicia los resultados de las presidenciales por irregularidades, dijo Capriles durante el desfile opositor.

El presidente boliviano, Evo Morales, anunció por su lado en un acto que presidió en La Paz, la expulsión del país de la agencia de cooperación estadounidense USAID por supuesta conspiración contra su gobierno. Por su parte, la Central Obrera Boliviana (COB) llamó a una huelga nacional en contra de la política del gobierno para el lunes próximo.

El dirigente sindical boliviano Juan Carlos Trujillo dijo que este Primero de Mayo "no tenemos nada que festejar y, por eso vamos a llevar adelante una huelga general desde el lunes 6 de mayo".

En La Habana, el presidente cubano Raúl Castro presidió el desfile del 1º de Mayo, donde unos 300.000 cubanos rindieron tributo a la memoria del fallecido mandatario venezolano Hugo Chávez.

En Brasil, decenas de miles de trabajadores asistieron en Sao Paulo, pulmón económico del país, a las celebraciones organizadas por las dos principales centrales sindicales del país, Fuerza Sindical(FS) y la Central Única de los Trabajadores (CUT).

El atomizado sindicalismo argentino dividió aguas en diversos actos para celebrar el Día del Trabajador, mientras la presidenta Cristina Kirchner abogó por un mundo donde "el trabajo vuelva a ser organizador social".

En Montevideo, la central sindical uruguaya llamó al gobierno del presidente de izquierda, José Mujica, a "abrir una nueva etapa de cambios" y reclamó un incremento del salario mínimo.

Por su lado en Chile, la presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Bárbara Figueroa, convocó a un paro nacional para el próximo 11 de julio en demanda de una reforma laboral.

En Perú, la Confederación General de Trabajadores anunció una jornada de lucha para el 4 de julio para exigir al gobierno que atienda las demandas de los asalariados.

Las celebraciones por el Día del Trabajo en Centroamérica estuvieron marcadas por diferentes reclamos de gremios y grupos ciudadanos, desde la demanda de mayor seguridad en Guatemala, hasta el rechazo a la visita del presidente estadounidense Barack Obama en Costa Rica.

Los ecuatorianos, por su parte, festejaron la efemérides con un multitudinario mitin del oficialismo, liderado por el reelecto presidente Rafael Correa.

En Asia, se destacó la manifestación de decenas de miles de trabajadores en Dacca para denunciar la muerte de más de 400 trabajadores en el derrumbe e incendio de talleres textiles, mientras que en otros países asiáticos se reclamaron aumentos de salarios y mejores condiciones laborales.

El sur de Europa clama contra el paro

Grecia celebra el Primero de Mayo con una huelga general y Francia escenifica su división sindical

El sur de Europa celebró el Primero de Mayo con diversas movilizaciones contras las políticas de austeridad y en demanda de otras que estimulen la creación de empleo. Además de España, países como Grecia, Francia, Italia, y Portugal convirtieron el día del trabajador en un clamor contra la desigualdad y las elevadas tasas de paro que soportan. Todos superan la media europea (10,9%), y en algunos de ellos se alcanzan cotas dramáticas. 

Es el caso de Grecia, con un índice de paro que, al igual que España, rebasa el 27%. Allí la protesta tomó forma de huelga general, algo que se ha convertido en triste rutina para un país asfixiado por los recortes impuestos por la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional). Dado que el Gobierno griego había trasladado la festividad del Primero de Mayo al próximo día 7 -por coincidir con la Pascua ortodoxa-, los sindicatos decidieron convocar un paro total. 

Sin embargo, el seguimiento no fue homogéneo. Portavoces sindicales manifestaron que fue «bueno» en la Administración Pública, el transporte marítimo -que quedó interrumpido entre las islas-, la industria o la banca, mientras que en el comercio apenas se dejó notar. Unas 13.000 personas, según la policía, se manifestaron en Atenas y Salónica. 

La fiesta del trabajador llegaba a Grecia días después de que el Parlamento del país aprobara -a instancias del Gobierno de Andonis Samaras y la troika- una nueva batería de recortes ligados a la obtención del siguiente tramo del rescate financiero. Una de esas medidas consiste en el despido de 15.000 empleados públicos hasta finales de 2014. 

Portugal, contra la troika 
 
Portugal, otro de los países más castigados por la crisis, fue escenario de protestas fundamentalmente dirigidas a la troika. En Lisboa, miles de manifestantes portaban pancartas en las que se podía leer '¡Fuera troika!', '¡FMI go home!', o 'La troika no me ayuda, me roba'. 

En Francia, donde aumenta la impaciencia frente al aumento del desempleo un año después de la llegada al poder de un gobierno de izquierdas, las dos principales centrales sindicales, la CGT y la CFDT, que no están de acuerdo sobre la respuesta a dar a la crisis, marcharon de forma separada. «Hay un fuerte descontento que debe expresarse», declaró Thierry Lepaon, líder de la CGT. 

En Italia, decenas de miles de personas se movilizaron para pedir al Gobierno que actúe contra el paro, la política de austeridad y la evasión fiscal. La mayoría de las marchas fueron pacíficas, aunque algunos manifestantes en Turín arrojaron huevos rellenos con pintura negra contra la policía. El presidente de la República, Giorgio Napolitano, alertó a los sindicatos sobre la «urgencia del trabajo» y les emplazó a que actúen «unidos a las empresas». 


Europa se ahoga en el desempleo

La desocupación en la Eurozona llega a cifras récord. Se reaviva el debate sobre la eficacia de la austeridad fiscal y sus efectos en el empleo.

Por: Financial Times
Tan sólo en España, la tasa de desempleo sobrepasó en marzo el 26%.  
Tan sólo en España, la tasa de desempleo sobrepasó en marzo el 26%.

Las filas de desempleados en la Eurozona se hicieron todavía más largas en marzo, generando un nuevo récord, mientras que el estimativo oficial de la inflación para abril cayó. Esto ha fortalecido la posición a favor de una política monetaria más relajada.

Eurostat, la oficina de estadística de la Unión Europea (UE), dijo que la tasa de desempleo ajustada cada temporada llegó a 12,1%, aumentando con respecto al 12% de marzo y al 11% de hace un año. El desempleo juvenil fue casi el doble de la tasa principal y no hubo señales de mejora en los países más golpeados: España y Portugal.

En el corto plazo, las cifras más recientes son una razón más para que el Banco Central Europeo (BCE) reduzca las tasas de interés cuando su junta directiva se reúna mañana; incluso a pesar de las dudas sobre si el recorte logrará estimular a las economías que han sido más golpeadas por la crisis de deuda.

Formalmente, el BCE no juega ningún papel en reducir la tasa de desempleo, pero las cifras de la inflación, que arrojan una desaceleración del 1,7% en marzo al 1,2% en abril, probablemente son más que suficientes para justificar un relajamiento, aun a los ojos de los miembros más conservadores de la junta directiva. El trabajo del banco es mantener a mediano plazo la tasa por debajo pero cerca de 2%.

Según los economistas, la aguda desaceleración en la inflación, generada por la caída en los precios de la energía luego de marcados incrementos a finales del año pasado, y posiblemente influida también por las fiestas de Pascua, puede revertirse parcialmente el próximo mes. No obstante, pone de relieve los bajos riesgos de un alza repentina.

En España, el 26,7% de las personas estaba sin empleo y poco menos del 56% de ellas es menor de 25 años. Las evidentes divergencias en la Eurozona quedaron de nuevo resaltadas por la diferencia con Alemania, donde la tasa se mantuvo a un nivel estable de 5,4% con respecto a hace un mes.

Las cifras probablemente alimenten de nuevo el debate sobre los méritos de la austeridad fiscal aplicada sin excepciones, que ensombrece la actividad económica. Las medidas a más largo plazo para liberar los mercados laborales, que tienen la intención de acompañar los programas de austeridad, aún no han tenido efectos claros. Marie Diron, asesora económica de Ernst & Young, dijo que las cifras fortalecían la posición a favor de un recorte en las tasas del BCE y demostraban que “la naturaleza y el ritmo de la consolidación fiscal debe ser revisado y corregido”.

Si el BCE reduce las tasas de interés, lo más probable es que reduzca un cuarto de punto porcentual de su principal tasa de financiación, lo cual la llevaría a 0,5%. Pero no es probable que les otorgue mucho alivio inmediato a los presionados países del sur de la Eurozona, porque sus bajas tasas de interés no se están trasladando a las empresas y hogares.
Por: Financial Times