La Paz, 3 dic (EFE).- Los partidos y las alianzas políticas de Bolivia culminaron hoy la campaña para las elecciones del domingo, a las que están llamados más de cinco millones de personas que el viernes y sábado vivirán el período previo de reflexión antes de votar.
El presidente Evo Morales, que parte como rotundo favorito en las encuestas para su primera reelección, cerró su campaña con un multitudinario acto en la ciudad de El Alto, de población mayoritariamente aimara, y que constituye el principal bastión electoral del mandatario.
Según todos los sondeos difundidos por los medios, el presidente Morales no tendrá ningún problema en ganar en primer vuelta y ser reelegido para gobernar cinco años más, hasta enero del 2015.
Las encuestas dan a Morales una ventaja de unos 30 puntos porcentuales sobre su inmediato seguidor, el opositor Reyes Villa, que es el ex prefecto de la región central de Cochabamba.
Reyes Villa y el centrista Samuel Doria Medina eligieron hoy para el cierre de su campaña la ciudad oriental de Santa Cruz, el bastión de la oposición, donde el primero tiene un apoyo en los sondeos superior a Morales.
El viernes y el sábado, la población boliviana gozará de un periodo de reflexión de 48 horas previo a la votación, tras una anodina campaña en la que no se ha celebrado ni un solo debate entre los candidatos.
Las últimas horas de la campaña han estado presididas por una polémica sobre la habilitación que decidió hacer la Corte Nacional Electoral (CNE) de 400.000 electores sobre cuyos datos existían interrogantes.
La decisión de la CNE fue saludada por el Gobierno de Morales, en tanto que la oposición expresó su rechazo y protagonizó protestas, entre ellas una huelga de hambre de doce mujeres opositoras, con el argumento de que se gestaba un fraude con registros presuntamente incorrectos.
La votación el domingo se celebrará con centenares de observadores enviados por la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea, y otras organizaciones.
Al cerrar su campaña en El Alto, Morales ratificó sus promesas de lograr que Bolivia avance hacia la industrialización, la integración vial y comunicaciones baratas con un satélite propio, como ejes de su futuro Gobierno.
Reiteró que los electores tienen dos caminos: "ir con el cambio" para profundizar las reformas políticas económicas y sociales introducidas durante su gestión, "o volver al pasado, al neoliberalismo".
El vicepresidente García Linera, que acompaña a Morales y aspira también a su reelección, explicó que tiene como objetivo ampliar el "Estado de protección social" y el desarrollo de las autonomías con base en la diversidad pluricultural del país.
Morales también criticó a EEUU y convocó a sus seguidores a luchar "sin miedo" contra el "imperialismo norteamericano", al señalar que él ha venido haciéndolo durante sus cuatro años al frente del Ejecutivo en Bolivia.
En el otro frente, el opositor Reyes Villa cerró su campaña en la plaza principal de la ciudad de Santa Cruz, tras una jornada en la que el Gobierno le acusó de estar planeando su salida del país el próximo lunes.
A principios de noviembre, un tribunal prohibió a Reyes Villa salir del país, e hipotecó el 50 por ciento de sus bienes, por un supuesto daño económico al departamento de Cochabamba durante su mandato prefectural entre 2006 y 2008.
El ministro de Gobierno (Interior), Alfredo Rada, aseguró hoy tener pruebas de que Reyes Villa habría reservado pasajes para viajar a Estados Unidos inmediatamente después de las elecciones, lo que el opositor negó hoy en declaraciones a varios medios.
Desde Santa Cruz y aunque no participa en estas elecciones, su prefecto (gobernador), Rubén Costas, -uno de los más duros rivales de Morales- se dirigió a los cruceños en un mensaje televisado para pedir el voto contra el "totalitarismo" que representa el proyecto oficialista.
"Voy a votar en contra del MAS (Movimiento al Socialismo, el partido de Morales). Santa Cruz merece liderazgos generadores de unidad (...) Rechacemos a quienes pretenden aprovecharse de la democracia y la libertad para beneficiar un proyecto totalitario". dijo el autonomista Costas.
El próximo domingo además de elecciones generales, se celebrarán cinco referendos autonómicos en La Paz, Cochabamba, Oruro, Potosí y Chuquisaca, doce consultas autonómicas indígenas, y una más en la región sureña del Chaco, la más rica del país en hidrocarburos.
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