La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó las muertes y toda especie de violencia contra los pueblos indígenas del departamento de Cauca, Colombia, que desde el comienzo de este mes luchan por la salida del Ejército y de grupos guerrilleros de la región. La Comisión pide a todos los actores involucrados en este conflicto que se empeñen en resolver la situación por la vía del diálogo.
El llamado se realiza para preservar la vida de los pueblos indígenas, que ya perdieron por lo menos dos integrantes desde el día 9, cuando los pueblos Nasa decidieron no tolerar más los enfrentamientos entre guerrillas y ejército en la zona urbana y rural de varios municipios del Cauca.
De acuerdo con la coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas (Caoi), los enfrentamientos con el ejército ya costaron la vida de Eduar Fabián Guetio Bastos, joven Nasa muerto el día 18 de julio supuestamente como consecuencia de heridas letales producidas por efectivos militares. Edur murió en Resguardo de La Laguna Siberia, municipio de Caldono. Otra víctima fue Mauricio Largo, victimado por un arma de fuego durante disturbios el día 19, en Huasaná, Caloto.
La Comisión Interamericana está particularmente preocupada por los miembros del Pueblo Nasa de los Resguardos de Jambaló, Toribío, San Francisco y Tacueyó, en Cauca, beneficiarios de la medida cautelar 255/11, que obliga al gobierno a tomar medidas para garantizar la vida y la integridad física de estos pueblos. La CIDH concedió la medida debido a que sabe de la situación de alto riesgo que enfrentan estos indígenas en virtud del conflicto armado y de los homicidios, desapariciones forzadas y otras violencias de las cuales son blanco los pueblos Nasa.
En marzo de este año, la Comisión Interamericana ya se había manifestado. El motivo fue la muerte de indígenas de esta etnia -en el contexto de enfrentamientos armados entre policía, ejército y grupos ilegales- y la vulneración de la integridad de tres niños por la manipulación de explosivos hallados en la escuela de Jambalo. En esta ocasión, la Comisión ya había llamado la atención al Estado colombiano para que evitara acciones armadas que pudieran poner en riesgo la vida de civiles.
"La Comisión Interamericana condena estos hechos de violencia que afectan a la población civil, incluyendo beneficiarios de medidas cautelares. Asimismo, la CIDH urge al Estado a adoptar en forma inmediata todas las medidas necesarias a fin de garantizar el derecho a la vida, la integridad y la seguridad personal de la población civil”, insiste la Comisión.
Contexto
El último día 9, los pueblos Nasa decidieron poner fin a los enfrentamientos entre el Ejército colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), que constantemente dejan heridos y desplazados en la región. Los indígenas dieron un plazo para que los militares y guerrilleros salieran del Cauca y decidieron desmontar las trincheras de las Farc y del Ejército para acabar con los conflictos.
La Asociación de Cabildos Indígenas del Norte de Cauca (Acin) prometió que la desmilitarización comenzaría el día 17 y así ocurrió. Antes, los indígenas alertaron que los militares y guerrilleros que insistieran en permanecer en la región serían retirados por la fuerza por la Guardia Indígena.
El día señalado, cerca de dos mil indígenas desmontaron una base militar que protegía dos antenas de celulares fijas en el monte Berlín, territorio sagrado para la etnia Nasa.
Los indígenas aseguran que van a luchar hasta que Cauca esté libre de conflictos armados. Después de casi tres semanas de enfrentamientos y resistencia, el gobierno colombiano y los indígenas Nasa están iniciando un diálogo a fin de resolver el problema en la región por vías pacíficas.
Traducción: Daniel Barrantes – barrantes.daniel@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario