Colombia: Neoliberalismo de cuerpo entero

 En entrevista concedida por el Ministro de salud Alejandro Gaviria a los periodistas de El Espectador Carolina Gutiérrez y Pablo Correa, el Ministro retrata de cuerpo entero el sentido último del enfoque neoliberal de la política pública. Para explicar por qué "odia tanto esa frase de que la salud no es un negocio", dice que "es porque soslaya una complejidad. El asunto no es que la salud no es un negocio; la pregunta es como hacemos compatible el negocio con el bienestar general": http://www. elespectador.com/noticias/ salud/no-me-imagine-oposicion- de-los-medicos-articulo-461514

No. El asunto es, precisamente, que la salud, la educación, la justicia, los servicios públicos, no pueden ser negocios, no pueden ser objeto de lucro, porque el lucro privado es lo opuesto al bien público. Estos bienes públicos deben estar excluidos de los circuitos mercantiles. Nadie debe enriquecerse a costa de la salud y el bienestar de las personas, por muy ideológico que un argumento como este pueda parecer a personas que, como el Ministro, parecen no entender la diferencia entre la ética y la ganancia.

Una cosa es obtener ganancia vendiendo televisores, por ejemplo, y otra hecerlo negándose a recibir un paciente en un hospital porque no tiene con que pagar, excluyéndole medicamentos para sus tratamientos porque son muy costosos, o limitando el tiempo de atención de los médicos en las consultas.

El "odio" no sustituye la fundamentación ética en el terreno de la defensa de lo público. Parece que la autorreconocida temperamental incontinencia verbal del Señor Ministro no es un defecto de personalidad sino, más bien, un atributo de su ideología.

Cordial saludo,

Orlando Pulido Chaves
Coordinador General

Foro Latinoamericano de Políticas Educativas -FLAPE-

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