El depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, regresó a su país y se alojó en la embajada de Brasil en Tegucigalpa, según le confirmaron a BBC Mundo funcionarios de esta sede diplomática.
"El presidente (Luiz Inácio) Lula (da Silva) me ha abierto su puerta, igual que el canciller (Celso) Amorim y esto nos ha servido para poder llamar a un diálogo aquí", le dijo Zelaya a BBC Mundo desde la embajada brasileña.
Luego de que cientos de seguidores de Zelaya se concentraran frente a la embajada cuando supieron de su regreso, el gobierno interino presidido por Roberto Micheletti decretó el toque de queda en todo el país desde las 16.00 hora local, hasta las 1800 del martes.
"Hoy lo que hay en Honduras es una insurrección del pueblo, una insurrección popular, pacífica del pueblo hondureño, y la disposición es luchar hasta restituir al presidente Zelaya en la presidencia, porque él está en la embajada, los golpistas en la presidencial", le dijo a BBC Mundo Juan Barahona, coordinador general del Frente Nacional contra el Golpe de Estado.
"Ahora viene la lucha por que ellos salgan del poder y restituir al presidente Zelaya", advirtió Barahona desde la embajada brasileña.
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