Credito: TeleSUR
Santo
Domingo, noviembre 27 - República Dominicana dio por terminado el
miércoles el diálogo con Haití sobre la aplicación de un polémico fallo
que priva de la nacionalidad a miles de hijos de inmigrantes haitianos
nacidos en el país, por lo que no participará de una reunión en
Venezuela, que actuaba como mediador en el conflicto.
El encuentro entre representantes de los dos países debía tener lugar el sábado en Caracas.
"Entendemos que el gobierno haitiano ha roto el acuerdo que firmamos la semana pasada (...) y, en consecuencia, no acudiremos a la reunión. Haití ha preferido tomar otro camino y eso pone fin a nuestras conversaciones, en estos momentos", dijo en un comunicado el ministro de la Presidencia, Gustavo Montalvo.
El Gobierno de Haití se ha opuesto a la aplicación de una sentencia del Tribunal Constitucional dominicano de septiembre que despoja de su nacionalidad a cientos de miles personas, el cual también es rechazado por otros países del Caribe.
La decisión del Gobierno dominicano se anunció horas después de que los países de la Comunidad del Caribe (Caricom) suspendieron el proceso para la admisión de Santo Domingo al bloque regional en protesta por la sentencia.
Fuentes del Gobierno dominicano dijeron a Reuters que el quiebre del diálogo se dio como consecuencia de los dichos del presidente de Haití, Michel Martelly, quien en la cumbre del Caricom habría sostenido que no confía en la buena voluntad de Santo Domingo para alcanzar una solución al tema migratorio.
Líderes extranjeros, agencias de la ONU y grupos de derechos humanos han pedido al Gobierno dominicano que revoque el fallo por considerarlo discriminatorio.
El Tribunal Constitucional dominicano decidió que los hijos de inmigrantes extranjeros indocumentados nacidos en el país desde 1929 no tienen derecho a la nacionalidad dominicana, en respuesta a un recurso de amparo de una mujer a la que se le negó una cédula de identidad y que la corte consideró haitiana.
República Dominicana y Haití, la economía más pobre de América, comparten una larga y permeable frontera sobre la isla de La Española. Según el tribunal, el 6,87 por ciento de los habitantes de Dominicana son de origen haitiano.
El encuentro entre representantes de los dos países debía tener lugar el sábado en Caracas.
"Entendemos que el gobierno haitiano ha roto el acuerdo que firmamos la semana pasada (...) y, en consecuencia, no acudiremos a la reunión. Haití ha preferido tomar otro camino y eso pone fin a nuestras conversaciones, en estos momentos", dijo en un comunicado el ministro de la Presidencia, Gustavo Montalvo.
El Gobierno de Haití se ha opuesto a la aplicación de una sentencia del Tribunal Constitucional dominicano de septiembre que despoja de su nacionalidad a cientos de miles personas, el cual también es rechazado por otros países del Caribe.
La decisión del Gobierno dominicano se anunció horas después de que los países de la Comunidad del Caribe (Caricom) suspendieron el proceso para la admisión de Santo Domingo al bloque regional en protesta por la sentencia.
Fuentes del Gobierno dominicano dijeron a Reuters que el quiebre del diálogo se dio como consecuencia de los dichos del presidente de Haití, Michel Martelly, quien en la cumbre del Caricom habría sostenido que no confía en la buena voluntad de Santo Domingo para alcanzar una solución al tema migratorio.
Líderes extranjeros, agencias de la ONU y grupos de derechos humanos han pedido al Gobierno dominicano que revoque el fallo por considerarlo discriminatorio.
El Tribunal Constitucional dominicano decidió que los hijos de inmigrantes extranjeros indocumentados nacidos en el país desde 1929 no tienen derecho a la nacionalidad dominicana, en respuesta a un recurso de amparo de una mujer a la que se le negó una cédula de identidad y que la corte consideró haitiana.
República Dominicana y Haití, la economía más pobre de América, comparten una larga y permeable frontera sobre la isla de La Española. Según el tribunal, el 6,87 por ciento de los habitantes de Dominicana son de origen haitiano.
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