Madrid, 12 nov (EFE).- Europa afronta de manera desigual el día de
protesta convocado por los sindicatos para el próximo miércoles, en
contra de las medidas de austeridad previstas en los distintos países.
En
España, CCOO, UGT, USO y STES-Intersindical han convocado la segunda
huelga general del año contra la política económica del Gobierno, aunque
el sindicato CSI-F (mayoritario entre los funcionarios) se ha
desmarcado de la convocatoria "por responsabilidad".
Esta huelga general, convocada en España y Portugal, se enmarca en una jornada de "acción y solidaridad" en toda Europa.
En
Portugal, país sujeto a las condiciones del rescate financiero
concedido en mayo del año pasado, este será el tercer paro nacional en
16 meses de Gobierno conservador, aunque en esta ocasión el segundo
mayor sindicato, (UGT, socialista), declinó sumarse a la iniciativa de
la primera central sindical lusa, (CGTP, comunista), pese a subrayar que
comparte el rechazo a las medidas de austeridad.
En Grecia, la
principal confederación de sindicatos de trabajadores del sector
privado, GSEE, ha convocado para el miércoles un paro laboral de tres
horas.
Aunque inicialmente se había convocado una huelga general,
el hecho de haberse celebrado una de 48 horas la semana pasada hizo que
los sindicatos se replanteasen su actitud y la jornada incluirá una
manifestación en el centro de Atenas.
El principal sindicato de
Italia, la Confederación General Italiana del Trabajo (CGIL), junto a
otros sindicatos sectoriales menores, han convocado un paro de cuatro
horas para ese día.
Más allá de encuadrarse en una jornada
reivindicativa europea, este paro de media jornada pretende expresar la
protesta concreta contra los Presupuestos para 2013 del Ejecutivo del
primer ministro italiano, Mario Monti.
Los cinco grandes
sindicatos franceses han convocado a los trabajadores públicos y
privados a sumarse a la protesta europea en concentraciones y
manifestaciones en la mayor parte de los departamentos del país, con la
intención de pedir la coordinación de políticas económicas, integrando
las dimensiones sociales y las medidas de solidaridad.
En Bélgica
no se ha convocado huelga general, pero sectores como el del metal y el
del ferrocarril tienen previsto realizarla, mientras que la CES y las
centrales belgas protestarán contra la austeridad ante las embajadas de
España, Portugal, Grecia, Chipre, Irlanda y Alemania; y celebrarán una
marcha hasta la sede de la CE, donde una delegación se reunirá con el
jefe del Ejecutivo comunitario, José Manuel Durao Barroso.
Las
acciones de solidaridad comenzarán en la noche del martes en Alemania
con un desfile nocturno con farolas en Aquisgrán, mientras que la
Confederación Alemana de Sindicatos ha anunciado para el miércoles
diversas acciones en varias ciudades del país, destacando una
manifestación convocada en Berlín junto a la emblemática Puerta de
Brandeburgo.
En el Reino Unido, la llamada Coalición de la
Resistencia ha organizado una protesta ante la sede londinense de la
Comisión Europea, que cuenta con el apoyo de la Confederación de
Sindicatos Británicos (TUC, siglas en inglés); mientras que en la
República de Irlanda, no está prevista ninguna acción sindical.
Los
sindicatos holandeses organizarán una conferencia con invitados
nacionales y extranjeros para expresar su solidaridad con los
trabajadores en dificultades de toda Europa; y en Luxemburgo los
sindicatos llevarán a cabo acciones informativas en las empresas y se
reunirán con el primer ministro, Jean-Claude Juncker.
Por su
parte, la Confederación de Sindicatos (ÖGB) de Austria ha decidido
limitar su participación a una recolecta pública de firmas en postales
especiales que llevan el lema "todos somos griegos" y que posteriormente
serán enviadas a los sindicatos de Grecia como muestra de solidaridad.
EFE
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